La manipulación o elevación de chapas puede realizarse por medio de dos equipos electromagnéticos diferentes:
En el caso de los electroimanes rectangulares clásicos, se ha tenido en cuenta la disminución de peso de los imanes al máximo posible, simplificando su construcción. Dichos imanes son capaces de manipular tanto chapas de una en una como varias a la vez, dependiendo del espesor de dichas chapas.
Se ofrecen en una amplia gama de anchos y longitudes para adaptarse a las distintas dimensiones de chapas existentes. En función de dichas dimensiones, se suministrarán uno o varios electroimanes montados en una viga fija o telescópica. Esta úúltima puede suministrarse con accionamiento electrohidraúlico o accionamiento mecánico con los carros de la grúa para la apertura y cierre de los brazos de la viga.
En el caso de los electropermanentes, se ofrecen como opción de máxima seguridad ya que la fuerza es realizada exclusivamente por imanes permanentes. Un breve pulso de corriente continua cambia la dirección de imantación de los imanes, logrando dos estados estables en el tiempo IMANTADO y DESIMANTADO. Se ofrecen dos tipos para manipulación y elevación de chapa a chapa y para manipulación de varias chapas a la vez (grandes producciones).
Tanto los electroimanes como los electropermanentes, van acompañados de un equipo eléctrico suministrado en armario metálico y pudiendo ser dotado de las siguientes características: